1.7.10

Seis meses sin comisaría de la policía nacional

Cuando ya se van a cumplir casi año y medio desde que el subdelegado del gobierno en la provincia de Cádiz, Sebastián Saucedo, se comprometiera en público a que la nueva comisaría de la Policía Nacional estaría inaugurada antes de la finalización del pasado año, hemos tenido que conocer que la flamante inauguración se llevará a cabo el próximo día 15 de julio, en plena canícula. Parece que la apretada agenda del Ministerio del Interior se flexibiliza en época de vacaciones, y tendrá tiempo para hacerse la ansiada fotografía tras más de seis meses de retraso.
Mientras tanto, las obras terminadas y los puertorrealeños esperando a la electoral "fotito" ministerial (van a poder hacerse pocas en el próximo año) sin poder sacarnos el DNI, ni el pasaporte, ni las denuncias, etc. y esperando como agua de mayo la dotación de los 120 agentes que debe tener una comisaría independiente, "con su propio comisario", Saucedo dixit.
Lo que deben saber los ciudadanos de Puerto Real es que ya en 1999, el entonces Ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, se comprometió por escrito a poner en servicio una Comisaría de la Policía Nacional en Puerto Real, independiente de la de El Puerto de Santa María y poner en marcha un módulo de 25 miembros de la Policía de Proximidad y una dotación de 40 agentes para ofrecer de forma inmediata los "servicios de expedición del DNI, de pasaportes, denuncias e incluso el parque móvil centralizado que no se utilice día a día" en el antiguo colegio de La Jarcía.
En aquel momento, el otrora reivindicativo Barroso consideró escaso el compromiso del gobierno central con Puerto Real y empezó una campaña demagógica en contra del Gobierno del PP al que muy pronto se unió el PSOE puertorrealeñó que no dudó en repartir propaganda del tipo de la imagen que acompaña a este artículo, y de contínuas visitas de la diputada jerezana Mamen Sánchez, cada vez que en nuestra localidad se producía algún incidente delictivo.
Se dedicaban a hacer política demagógica utilizando lo más sensible de los sentimientos de los ciudadanos, la inseguridad.
Hoy, el fiel aliado de la oligarquía socialista gaditana, el filocomunista, José Antonio Barroso, se mantiene en su silencio complice y pactado mientras uno a uno de los compromisos con Puerto Real se van quedando en la cuneta. Pero a él le importa poco, no vayamos a molestar a los "señoritos" socialistas y nos retiren los privilegiados sueldos, los despachos oficiales, el cochecito oficial y los habituales viajitos a Madrid para "defender los intererses de los puertorrealeños". ¡¡Vivan las caenas!!

No hay comentarios: