Cuando se encuentra en el centro del debate político de la Bahía de Cádiz el futuro industrial de Navantia y su vinculación a la construcción militar, resulta interesante este informe del Grupo de Estudios Estratégicos sobre los retos del gobierno del Partido Popular en esta materia.
Sus recomendaciones son las siguientes:
El sector industrial necesita del nuevo gobierno medidas concretas de ayuda con el objetivo de:
a) Apuntalar la política de seguridad y defensa nacional.
b) Mantener el empleo, especialmente el altamente cualificado.
c) Mantener a España en los foros tecnológicos internacionales de primer nivel.
d) Fortalecer la imagen exterior de España.
En un entorno presupuestario muy restrictivo y con la incapacidad del sistema financiero nacional de posibilitar fórmulas de colaboración público privada, la industria de defensa necesita básicamente:
a) Un plan a largo plazo real y creíble; por muy negativo que sea.
b) Una solución al programa de la financiación de los programas especiales, con su integración como deuda general del estado y no del ministerio de defensa.
c) Cobrar las facturas emitidas y saber que las próximas que se emitan se cobrarán en tiempo.
d) Nuevos programas para mantener una capacidad industrial, por muy residual que sea.
e) Un auténtico plan de apoyo a la exportación de material de defensa que involucre activamente desde la Corona hasta el último funcionario de la Administración, incluyendo instrumentos financieros de apoyo a la exportación.
f) Un plan único de I+D que aproveche las múltiples sinergias entre distintos programas y organismos; con participación del sector privado en su planeamiento, financiación y ejecución.
g) Una reversión de la tendencia de incremento de los gastos de personal en el ministerio de defensa frente a los gastos de capital para llegar a la media de los países europeos.
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