El expresidente peruano Ollanta Humala ha sido trasladado a la prisión de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía Nacional en Lima para cumplir 18 meses de prisión preventiva por un caso de corrupción por la presunta recepción de tres millones de dólares de una empresa brasileña para la campaña electoral de 2011 y de dinero «ilícito» procedente de Venezuela para la campaña de 2006 que le llevó a la presidencia de la república andina. Este caso, denominado Odebretcht, también ha supuesto el ingreso de su esposa, Nadine Heredia. La caída en desgracia del régimen bolivariano de Venezuela y el acceso de los partidos de la oposición a la documentación oficial sobre el uso de ingentes cantidades de millones que primero Hugo Chaves y luego Nicolás Maduro hicieron para influir en las elecciones de numerosos países iberoamericanos. Los casos de los Kirchner en Argentina, de Lula en Brasil y ahora de Humala en Perú, debería hacer pensar a algunos en la Fundación CEPS de Podemos...el dinero siempre deja rastro.
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